martes, 5 de febrero de 2013

Pesadilla en Elm Street 5: El niño de los sueños (A nightmare on Elm Street 5: The dream child) (1989) - Stephen Hopkins

Sinopsis: Alice y Dan viven felices tras haber acabado con Freddy. Las pesadillas han terminado y Alice espera plácidamente que nazca su bebé. Sin embargo, Freddy planea apoderarse del alma del hijo que espera Alice.

Aviso: La crítica puede contener algunos spoilers.

Crítica: Ni los bebés se pueden escapar de las garras de Freddy.
En 1989, Stephen Hopkins (también director de la película "Depredador 2" (1990)) dirigió esta quinta entrega de la saga de pesadillas más famosa, y "Pesadilla en Elm Street 5: The dream child" se convertiría en una de las peores de la saga en cuanto a críticas, pero: ¿Hasta qué punto es cierto eso? Sí que es verdad que mejor que la cuarta no es, ni que la tercera, y ya ni hablo de la primera, la cual no ha sido superada
de momento (y dudo que lo haga alguna película de esta saga en un futuro próximo o lejano), pero mejor que la segunda es, ¿Y por qué? Porque tiene el mismo Freddy de siempre, el humor que le caracteriza y porque es más buena en bastantes sentidos, y luego llegará la sexta parte de la saga, que también es más mala que esta quinta. Entonces, ¿Por qué se la ha criticado tanto? En mi opinión se la ha criticado de esa manera por no ser ni de las mejores ni de las peores, la cuarta iba tirando a más que aceptable (en cuanto a calidad como película y secuela de Pesadilla en Elm Street), pero esta quinta entrega se queda justo en medio, recibiendo muchas malas críticas "sin tener la culpa" de ello, ya que las que más se lo merecen son la segunda y la sexta partes de la saga.
Esta parte de Pesadilla en la cual las muertes hacen referencia a distintas clases "sociales" (los frikis, los deportistas y los esnobs y/o pijos, aunque más sería los obsesionados con su cuerpo y/o estética), por llamarlo de alguna manera, que en común tienen que son amigos entre ellos y de Alice, y Freddy aprovecha eso y sus condiciones sociales para matarles de una manera diferente a todos ellos, y siempre con ese tono irónico y sarcástico lleno de humor auto-parodiando las muertes que él mismo provoca.
Freddy sigue igual que siempre: increíble y muy bien interpretado por Robert Englund, y veo que este actor nunca falla en ninguna película de esta saga, y eso se 
agradece.
Y con Freddy llegan las muertes.
En esta ocasión, la quinta película de Pesadilla en Elm Street tiene muertes algo irregulares, me explico: tiene una muerte más que aceptable (la muerte de Greta, la mejor de la película), otra simplemente aceptable (la de Dan, el novio de Alice, la protagonista) y otra menos que aceptable, demasiado simple (la muerte de Mark, mucho tiroteo y persecución entre él y Freddy al principio pero después acaba en nada), y si además le sumamos la poca cantidad que han habido, el resultado no es satisfactorio, para nada. Pero hay un lado bueno: las pesadillas que causa Freddy siguen siendo buenísimas, así que consigue compensar un poco las muertes algo decepcionantes en general (excepto, repito, la de Greta).
Y con las pesadillas y las muertes viene la sangre. De sangre no hay mucha, por no decir casi nada de nada, pero las muertes que hay no requieren mucha sangre.
El final del film, como siempre, acabando con Freddy, esta vez le mata Amanda, la madre de Freddy, gracias a la ayuda de Jacob, el hijo de Alice, que termina en una especie de posesión (aunque no lo es exactamente) por parte de una personalidad parecida a la de Freddy.
Con más de dos bebés en la película (Jacob y se ve a Freddy como un feto/bebé), con la buena muerte de Greta y las buenas pesadillas de Freddy. A estas alturas, uno ya se acaba acostumbrando a los efectos especiales/visuales algo cutres, pero repercuten en algo. No es de las mejores de la saga, pero tampoco de las peores.

Mi nota: 5,4 sobre 10

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